¿Así que has decidido tener un perro? tómate tu tiempo.

 

 

Si estás pensando en tener un perro no tengas prisa ni te quedes con el primero que te ofrezcan por emoción o por pena.  Un perro es un ser vivo que va a ser un nuevo miembro de la familia durante muchos años. Hay que tomar este tipo de decisiones de una manera responsable y no por impulso.

Tener un perro conlleva muchas responsabilidades que hay que tener previamente muy claras. Un perro significa horas de alegría y compañía pero también que parte de tu tiempo, se lo tendrás que dedicar al él. No es sólo que estés con tu perro, es darle sus paseos, una buena alimentación, educarle para que se adapte bien al entorno y por supuesto llevarle al veterinario de una manera regular para que haga un seguimiento de su salud. Si tienes claro que quieres asumir todas estas responsabilidades ahora tienes que pensar si prefieres darle la oportunidad a un perro que esté en adopción o tener un perro de raza, así como su edad, cachorro, adulto o mayor.

¿Adoptado o de raza?

No vamos a entrar en si es mejor un perro adoptado o un perro de raza pero una vez ya tengas decidido este punto, una vez más, no tengas prisa tomar una decisión tan importante. Si quieres adoptar visita varios albergues y si quieres que sea de raza, ve a distintos criadores reconocidos, nunca compres por anuncios en internet o en el periódico, ni tampoco en tiendas donde en realidad se va a ser muy difícil conocer la verdad sobre la crianza del perro. Haz todas las preguntas que necesites para informarte bien sobre el perro del que te hayas enamorado. Un buen criador quiere el bien de la raza y no le importará contestar a tu preguntas, es más, sería normal que el también te las haga a ti. Si es un perro de un criador, te aconsejamos que visites el criadero antes para ver las condiciones en las que está la madre, otra vez mas cuando el cachorro ya tenga un mes o así, podrás ver si están con la madre, el juego entre ellos, sería genial si hubiera niños que les acariciaran suavemente y bajo la supervisión de un adulto, etc., y finalmente el feliz día que te lo llevarás a casa. Podrás observar muchas cosas antes de decirte por el que será tu compañero muchos años. Un buen criador, teniendo las adecuadas precauciones de higiene no tendrán ningún problema en que le visites ya que las experiencias durante esta etapa también son fundamentales para el desarrollo del perro.

Si el perro está en un albergue, los responsables también te podrán hablar sobre el carácter que hayan observado en el perro durante su estancia con ellos.

Que tengáis un carácter compatible es muy importante que para que todo funcione bien.

Hay perros más “audaces” otros que prefieren no ser el primero que investigue pero también “curiosos aunque más tranquilos" y otros más retraídos o "tímidos".

• Perros muy enérgicos: si tu eres una persona de hacer poco ejercicio, no tiene sentido, que te quedes con un perro con mucha energía ya que estos perros necesitan la atención de personas que realmente  sepan y puedan cubrir sus necesidades. De lo contrario, podría terminar teniendo un perro frustrado que podría generar problemas de comportamiento. Algo muy complicado para ti pero sobretodo, algo que no es justo para el perro. Un ejemplo de este tipo de perros pueden ser los border collies.  Son una maravillosa raza de trabajo inteligente y activa que necesitan sentir hacer ejercicio físico y mental y que las normas estén claras para ellos. Por tanto hay que documentarse bien y no decir luego que es que no sabias que la raza era tan nerviosa...
• Perros tímidos: el otro extremo serían los perros tímidos. Para darle una oportunidad real a estos perros, también es ideal que la persona que se lo quede, tenga un carácter templado y a la vez sensible  que sepa guiarle durante el proceso de crecimiento y adaptación para su problemas de inseguridad o miedo vayan a menos y no a más. Son muchas las veces que he visto personas con una calidad humana extraordinaria pero que no sabían cómo tratar a un perro con miedo porque no es nada fácil y finalmente éste ha terminado teniendo severos problemas de conducta. Si este fuera tu caso y ya tienes al perro en casa, lo mejor que puedes hacer debes buscar ayuda de un buen profesional que te pueda ayudar. De no hacerlo, la cosa puede ir a peor. A veces sin querer podemos estar incrementando el problema nosotros mismos.

• Perros amistosos con una energía media: Para alguien que no tenga mucha experiencia o no tenga tantas energías, lo ideal sería escoger un perro con un carácter amistoso pero más tranquilo.

¿Importa la edad?

Importa muchísimo. Cada etapa tiene sus necesidades y es importante informarse para conocerlas y saber aplicarlas. De esta manera por ejemplo tanto un cachorro como un perro mayor necesitas bastantes horas de descanso. Es un error enorme que un cachorro haga mucho ejercicio tanto por motivos físicos ya que aún sus huesos no están formados del todo al menos hasta que llega al año y por motivos psicológicos el cachorro necesita su tiempo de descanso mental. En el caso de los perros mayores, este tema parece estar más claro para todos.

Los perros adultos pueden realizar mayor número de horas ejercicio pero también es básico los periodos de descanso porque a parte de posibles lesiones pueden acaban siendo perros híper activos. Así que también hay que respetar sus necesidades de descanso.

¿Se aprende a cualquier edad?

Si a cualquier edad, quizás de distinta manera, se aprende. De hecho, esa es una de las mejores cosas que tiene convivir con un perro, que si le estimulas correctamente, siempre estará dispuesto a aprender nuevas cosas. Existen por ejemplo, juguetes interactivos para perros para cualquier para todas las edades que les enseñarán y estimularán física y mentalmente.

Si tienes un cachorro, el primer año de su vida es fundamental para aprender. No seas perezoso ni pienses que esta etapa va a durar toda la vida porque no es así. Tienes un tiempo precioso para hacer bien las cosas, es tu deber aprovecharlo. Es un momento excepcional para socializarle, generar un buen vínculo con él, cuidado con el híper apego y de asentar en el las normas básicas que se suponen que ya se han iniciado desde cachorro. Utiliza el juego y actúa siempre de forma justa y positiva con él.

Si has escogido tener un perro adulto también es bueno acudir a un profesional o un centro de educación donde podrá dentro de un entorno controlado aprender educación básica y a jugar con otros perros. Cuando tu perro ya está a punto de dejar de ser cachorro y entrar en la edad adulta, es también una etapa ideal para enseñarle cosas, ya que será capaz de estar concentrado durante mayor tiempo.

Si te has decidido por un perro mayor infórmate sobre sus necesidades tanto físicas como emocionales. Un perro mayor puede ser muy feliz a tu lado y tu con él y necesita hacer ejercicio, tener estímulos mentales que hagan trabajar su mente y socializar con otros perros con los que sea compatible por su carácter. Por supuesto, hacer un buen seguimiento de su salud para anticiparte a problemas típicos de la edad que se pueden mitigar muchas veces con cambios de alimentación o algún suplemento que te recomiende tu veterinario.

YA SABES, ¡¡¡TÓMATE TU TIEMPO!!! no tengas prisas. Es una decisión importante que vas a tomar en tu nombre y en el de tu perro.

¡Esperamos que os haya gustado este post!